martes, 15 de mayo de 2007

El Mal de Amores te fatiga

Para quien atraviesa un Mal de Amores el mundo es un hueco repelente carente de interés. El Mal de Amores es una enfermedad con síntomas escandalosamente parecidos a los de la depresión, con la terrible contra de que ni siquiera es apropiadamente tratada ni identificada por los médicos. Mucho menos por los familiares. Quien sufre penas de amor tiene que enfrentar las situaciones grotescas diarias de la vida con una cara aceptable y maneras mínimamente correctas. Por ello, ciertas situaciones que son tortuosas de por sí, como los bautismos, los casamientos, cumpleaños, pasan a ser un infierno horriblemente real y crudo. En esas situaciones que por lo general surgen los domingos, jueves de noche o viernes al mediodía, ¡hay que poner cara de normal! Hay que fingir que uno no se está enloqueciendo. Fingir, fingir y fingir. El mal de amores puede resultar terriblemente cansador…